miércoles, 14 de mayo de 2014

Con Ignacio Bellido

Fue una tarde agradable con Ignacio Bellido, que se quejaba en algún momento que la poesía parece se quedó en lo bucólico.

A vuela pluma escribí en su libro una posible respuesta... y ahora la maduro

Cemento y fierro
y vidrio en los muros de las casas.
Una ciudad objetal cosista fría
ruïdo de tráfico
claxon campana y tranvía.

Lo siento, me vuelvo
al claustro en la flor labrada
del capitel antiguo
A lo bucólico de la piedra
a las humanidades
me vuelvo a Salamanca.

Y sin embargo porfía Bellido
y habla del Caos, que cosa de ver es
no siendo ser, el ente otra cosa
que la cúspide señor de lo complejo.

Tanto que nuestro cerebro no acierta
con el hilo de Ariadna a encontrarse
la ecuación que descifra
de él todo el engranaje.

Y hablará más luego, de entropía
irreversible paradoja de la vida
llevando la energía hacia la nada
en el tiempo que crecen edad sabiduría.

¿Poetas somos o es filosofía?
Viaje en carro del hombre que sabe
ruta de Parménides entre lo que es
sin ser posible que no sea
y lo que no es
que es preciso también que no lo sea...