martes, 31 de marzo de 2009

Incesto 2 Noli me Tangere

Noli me Tangere 2


Papa Freud, tuvo una explicación genial para el incesto. Parece que la evocación de una imagen de su madre, con poca ropa, y en el curso de un viaje. Produjo en la tierna mente de Segismundo una deseo sexual perverso.


Con su portentosa capacidad para descifrar lo ignoto. Freud le dio por suponer una horda primitiva promiscua y escasa de hembras. Donde la natural competencia entre los machos derivó en en la violencia y el asesinato. Y en el caso del Edipo una forma gloriosa de plantear el conflicto generacional.


Lo cierto es; que sabiendo lo que hoy sabemos, de biología y teniendo como ejemplo lo sucedido con familias y razas endogámicas. Una tribu que como la de que Freud supone aplicara la competencia sexual a esos extremos tendría sus días contados ya que aquel individuo que no pereciese a manos de su rival, sería en virtud de la endogamia un débil biológico y mental. Es difícil que un individuo así se corresponda con el “triunfador” que Darwin prescribe como paradigma de adaptación y sobrevivencia.


Por otra parte una horda con una esperanza de vida de unos 30 años, si hacemos caso a lo que dicen los restos fósiles encontrados y con una infancia de al menos ocho hace imposible pensar que un hijo pudiera encontrar receptiva a su madre en el momento de alcanzar la madurez sexual.


Por tanto no queda otra posibilidad que reducir las causas del incesto a un ámbito meramente cultural. Cultura Sociedad Educación son los tres pilares sobre los que se deben estudiar estas conductas peculiares.


Creo que así se pueden encuadrar, todas las múltiples formas con que el incesto se manifiesta en la sociedad.


El pueblo judío, del que La Biblia, da una imagen de costumbres y leyes, no solo reconoce el derecho de rescate Onan Booz en que el pariente mas próximo tiene derecho y deber de engendrar hijos en la viuda.


Pero cuando toca el tema del incesto, concretamente con Lot y esgrime la necesidad de conservar su estirpe como justificación. Son sus hijas las que toman la decisión de emborrachar al padre para lograr su propósito (Génesis 19 31-38)

Y hasta aquí mi exposición. No voy a emitir un juicio de valor sobre la conducta descrita, no se trata de un caso como el de Josef Fritzl, el “monstruo de Amstetten”. Donde hay además esclavitud. Tanto si solo es una fantasía sexual, como si son hechos ciertos en mi condición de observador solo puedo tomar nota.

Otra cosa sería; que alguno de los implicados, pidiera apoyo psicológico, pero entonces la reserva, la ética, y secreto profesional, me impedirían escribir estas lineas.

Kasi


No hay comentarios: